Mi Historia- Capítulo 4

No sé cuento tiempo estuve en mi cuarto mirando al techo sin saber que hacer. Pero finalmente me levanté de la cama y me dirigí a mi mesita de noche. En mi mesa de noche había una urna de cristal, dentro de ella descansaba una pequeña serpiente de un color rojo brillante. Con cuidado metí la mano en la urna y saqué la serpiente que se enrolló en mi mano torpemente. La saqué y me senté en el suelo mirándola.

• -Hola preciosa - dije sonriendo mientras ella se deslizaba por mi brazo- 
• - La serpiente me miró y como muchas otras veces asintió con la cabeza a modo de  saludo-
• - ¿ Has oído lo que ha pasado? - la pregunté esperando una respuesta-
• - La serpiente se paró en seco donde estaba y me miro con sus pequeños ojos negros- Lo oí todo- dijo con claridad-
• - No puede evitar sonreír al escucharla. Ya estaba acostumbrada a entablar conversaciones con ella, pero aún así siempre me sorprendía. No le había contado nunca a nadie que podía hablar con ella, y que el tal Arthur me mandara esa indirecta sobre las serpientes me había sorprendido mucho.- ¿ Y qué hago?- la pregunté curiosa-
•  - Ella se deslizo hasta mi hombro sin decir nada. Siseó un par de veces y por fin me miró- Mi niña eso lo tienes que decidir tu sola- dijo como si fuera obvio- Pero yo que tu no desaprovecharía esta oportunidad - dijo con tranquilidad- Si esta no es tu familia, deberías de conocer a la tuya de verdad.-
• - La miré y asentí. Entendía a la perfección lo que quería decirme.- Está bien- dije más calmada- De todas formas lo pensaré.-

Charlé con ella un bueno rato. Nos echamos en la cama y seguimos hablando de las posibilidades que tenía, hasta que oímos como alguien llamaba a la puerta.

• - Pasa -  dije con claridad.-
• - Arthur entró en mi cuarto sonriendo- Hola Alice - dijo acercándose donde estaba- ¿ Puedo? - dijo señalando mi cama-
• - Claro - dije haciéndole un sitio- 
• - Se sentó y reparó en la serpiente que yo tenía en el hombro en esos momentos- Vaya - dijo mirándola fascinado- Es muy bonita - comentó-
• - La serpiente se deslizo por la cama hasta llegar a Arthur y le miró con curiosidad siseando-
• - Arhtur me miró - ¿ Qué ha dicho?- me preguntó dando por hecho que yo la había entendido-
• - Por un momento pensé en decir que no sabía que había dicho. Pero finalmente decidí decir la verdad, total no perdía nada por ello- Dice menudo revuelo has montado con tu llegada. Y que está encantado de conocerte.- traducí al pie de la letra.-
• - Yo también estoy encantado de conocerte- dijo sorprendido- Sabes - me miró sonriente- Ta pareces a tus padres- dijo como si fuera obvio- Pero sobre todo a tu madre.
• - Le miré y asentí- Si tu o dices..- dije sin más ya que no podía opinar al respecto-
• - Tu padre también hablaba parsel - prosiguió pero se parí en seco- Vamos que hablaba con las serpientes - aclaró-
• - AA eso - dije entendiendo- Parsel- repetí- Suena bien.-
• - Sonrió de medio lado- Bueno, siento todo el revuelo que he causado- se disculpó- Pero era necesario.-
• - Le miré sonriendo- No pasa nada, solo que me ha sorprendido bastante.-
• - Sonrió y se levantó- Pasaré aquí la noche para que puedas pensar qué quieres hacer. Pero mañana por la mañana volveré a casa, si has decidido venir pasarás nosotros la última semana de vacaciones- sonrió de medio lado como yo solía hacer- Y conocerás a tus primos .- Dijo por último y salió de mi cuarto dejándome sola.-

Pasé la noche tirada en la cama con mi serpiente junto a mi. Me reconfortaba tenerla conmigo, así no me sentía tan sola.