domingo, 5 de febrero de 2012

Mi Historia- Capítulo 12

A la mañana siguiente me desperté y miré a mi alrededor. Me acordé de donde estaba y salté de la cama, mis compañeras también estaban despiertas. Nos pusimos nuestros uniformes a juego con el color de nuestra casa y bajamos a la Sala Común donde nos esperaban el resto de alumnos. Todos estaban abajo armando un buen jaleo mientras varios chicos mayores intentaban hacerles callar. Me coloqué un poco apartada del resto de alumnos ya que no conocía a ninguno y odiaba el jaleo. Por todos se callaron y un chico mayor, el prefecto de Slytherin nos hizo salir de la Sala Común. Caminamos todos juntos por los pasillos en dirección al Gran Comedor. Entramos en la enorme sala y al igual que la noche anterior miré hacia el techo. Esta vez había un cielo azul muy agradable que daba sensación de hacer mucho calor. Me senté en mi mesa y miré hacia la mesa de los Griffindor. Vislumbré a mis primos sonrientes conversando con los de su Casa. Bajé la mirada a mi plato un poco perdida, tenía que empezar a hacer amigos. De repente entraron en el Gran Comedor varias personas de la casa Slytherin. Un chico moreno alto se acercó hacia donde yo estaba sentada.

  • - Así que es cierto - dije indiferente.- Slytherin deja entrar ahora hasta a gente como tú.- dijo con tono de desprecio.-
  • - Perdona?- pregunté sin entender- Que quieres decir con eso.-
  • - Me miró de arriba a abajo sorprendido- Weasley- se limitó a decir como que fuera obvio.-
  • - Me levanté del banco encarándome a él- Y qué problema hay porque sea una Weasley?.- dije seria.-
  • - Pues si tienes esos humos ninguno- se limitó a decir indiferente-Soy Marcus, Marcus Flint .- dijo con voz áspera.- Bienvenida.-
  • - Le dediqué una media sonrisa desconfiada.- Alice Weasley.- me limité a contestar.-
  • - Asintió sonriente.- Estos son Jake y Mike.- dijo señalando a sus acompañantes .- Y ellas son Anne y Fiby.-
  • - Asentí sonriendo a cada uno de ellos.- Ajá.- dije pensativa.-
De pronto Albus Dumbledore, el director, se levantó de su asiento y la sala enmudeció. Estaba igual de imponente que la noche anterior y una gran sonrisa cruzaba su agradable rostro.
  • - Por favor un minuto de silencio.- pidió amablemente.- Al lado de cada uno de vosotros se encuentra vuestro horario, espero que todos cumpláis con él .- nos miró mientras mirábamos nuestros horarios que había aparecido de repente.- Sin más dilación os deseo un buen comienzo de curso, los alumnos de primer curso si tenéis cualquier duda de donde debéis de ir solo tenéis que acudir al prefecto de vuestra casa, suerte.- dijo sentándose y dando por finalizado su labor.-
Miré mi horario con curiosidad, mi primera clase sería herbología, con los de Huffelpuf, y tenía 10 minutos para llegar. Todo el mundo empezó a levantarse de la mesa para irse a clase, así que hice lo mismo. Rápidamente me dirigí a la Sala Común, dije la contraseña con claridad y entré. Fui directa a mi cuarto, cogí el libro de Herbología y metí el resto en mi mochila y salí disparada hacía los
invernaderos. Salí del castillo y me uní a un grupo de chicos de Huffelpuf de primer curso que se dirigían hacia los invernaderos. Me coloqué detrás de ellos pensando en mis cosas. Por fin divisé los invernaderos y miré la hora, llegaba un poco pronto. De repente se oyó el grito de un chico detrás nuestro. Todos los de Huffelpuf y yo incluida nos dimos la vuelta. Un chico de pelo color café oscuro y muy apuesto corría hacia nosotros con la cara roja por el esfuerzo. Cuando llegó a nuestras altura se paró en seco y tomó aire. El grupo de Huffelpuf estaba tan sorprendido como yo por la aparición del chico. Le miré con curiosidad, sin lugar a dudas era un Huffepuf, llevaba el uniforme de esa casa. Supuse vendría a buscar a algún Huffelpuf, así que me di la vuelta decidida hacia los invernaderos.
  • - Alguien sabe dónde está Alice Weasley.- dijo el chico aún cansado volviendo a cojer aire.-
  • - Al oír mi nombre me di la vuelta y miré al chico.- Soy yo .- dije indecisa acercándome donde estaba.-
  • -Levantó a vista del suelo respirando ya con normalidad.- Esto.. Si soy Cedric Diggory.- dijo tendiéndome una mano.- Dumbledore quiere verte.- me informó.-
  • -Le tendí la mano sonriente.- Encantada .- dije sorprendida al oírle.- Dumbledore?- pregunté seria.- Para qué?- inquirí.-
  • - No lo sé.- dijo calmado.- Yo solo vengo a acompañarte hasta su despacho.-
Sin pensarlo mucho y un poco harta de las miradas que me echaban los del grupito de Huffepuf, asentí a Cedric y eché a caminar con él hacia el castillo.
  • - Bueno - dijo Cedric por romper el silencio.- Así que una Weasley en Slytherin .- musitó.-
  • - Le miré extrañada.- Tan raro es?- pregunté sin pensar.-
  • - Bueno, no sé, no es una casa muy transitada por los miembros de tu familia .- dijo sincero.- Pero bueno, el sombrero sabrá lo que hace.- me miró- de todas formas no pareces como los otros Slytherins, los que conozco no son muy agradables.-
  • - Asentí, si tenía bastante entendido que los Slytherin odiaban a el resto de casas.- Bueno, no sé me gusta llevarme con todo el mundo.- dije indiferente.- Ahora enserio, no sabes para qué´me quiere ver Dumbledore?.- inquirí.-
  • - Que va - dijo contrariado- Simplemente me dijo que te buscara que estaría es Herbología y que te llevara a su despacho.-
  • -Asentí no muy segura.- Bueno, pues espero no haberme metido en un lio .- dije pesantiva.-
No tardamos en llegar al castillo, no se veía ni un alma. Todo debían de estar en sus respectivas clases. Cedric me guió por los pasillos hasta una gran pared. Miró la pared con detenimiento y dijo una contraseña que no oí. Unas escaleras aparecieron en la pared.
  • - Bueno Alice .- dijo sonriente.- A sido un placer conocerte, si alguna vez necesitas algo no dudes enpedírmelo.-  dijo con amabilidad.- Dumblero te espera arriba.- Dicho esto se fué.-
  • - Adiós .- me despedí.-
Miré las escaleras un poco asustada, sin embargo con decisión comencé a subirlas. Cuando por fin llegué arriba me encontré con una gran puerta. Dudé por un instante pero finalmente la curiosidad pudo a los nervios y llamé. La puerta se abrió solo y dentro se oyó la voz de Dumbledore invitándome a pasar. Tras vacilar un instante entré.
  • - Buenos días señorita Weasley.- dijo Dumbledore de pie junto a su escritorio.- Espero que su llegada al colegio haya sido agradable.- se dió la vuelta y me miró detenidamente.-
  • - ESto..- carraspeé- Si claro.- añadí con rapidez.-
  • - Tranquilícese.- dijo amablemente.- no voy a castigarla, solo quería saber si todo está en orden, su entrada e la casa Slytherin ha levantando rumores.- dijo somo si eso lo explicara todo.-
  • - Asetí.- Eso dicen.
  • - Sonrió satisfecho.- no parece que eso la preocupe.- se dirigió a un gran sillón y se sentó en él.- Me alegro, espero de usted grandes cosas .- añadió.-
  • -Asentí.- Bueno y para qué quiería verme director?- pregunté sin pensar.-
  • - Sonrió.- Vaya directa y sin rodeos .- comentó.- Bueno señorita Weasley.- Sé todo lo que usted ha tenido que pasar para estar aquí hoy, mucha gente habla de usted, conocen vuestro nombre.-  me miró con pena.- Todos conocían a sus padres y lamentan su muerte, sin embargo debe saber que también hay gente que solo desea hacerla daño, y utilizarán la muerte de tus padres para herirte.-  dijo serio.- Por eso creo que es mi deber avisarla de los peligros que tiene.-
  • - Asentí de nuevo entendiendo, hasta ahora no me había planteado anda de eso.- Muchas gracias director.- dije cortesmente.-
  • -Bueno señorita usted prométame que no se meterá en líos y que se aplicará en las clases.- dijo sonriente.- Ya puede irse.-
  • - Asentí.- Gracias- repetí dándome la vuelta para irme.-
  • - Ah y señorita Weasley.- dijo antes de que saliera.- Em verdad se parece mucho a sus padres.- dijo sonriéndome una vez .-
Salí del despacho del director sorprendida por todo lo que me había dicho, pero muy agradecida porque hubiera sido tan claro conmigo. Miré la hora mi clase de herbología ya había acabado y tenía cinco minutos para llegar puntual a mi clase de transformaciones con la profesora McGonagall. Heché a correr por las pasillos hacia la clase.